Siempre, cuando alguien se aleja, o nos alejamos de quienes queremos, y pensamos en que solo es una parte de nuestra vida, que solo hay que comprender, y aceptar... siempre, pero siempre, pensé que era solo una cuestión de tiempo, que el reloj iba a dar vueltas, cada vez mas rápido, y así sanar nuestro dolor , nuestra herida.
Ademas, solía estar cuasi seguro de que llegarían otros sentimientos, otros vientos, otros olores y colores, que harían que mi mente volara lejos, mi alma volviera a renacer y yo, fuese otro, pero el mismo a la vez.
Hoy me freno, y comparo. Realmente, son otros sentimientos que me florecen, son otros vientos que me vuelan el flequillo, son otros los olores que hoy percibo y cambiaron los colores, de mis días. Pero esta vez, el tiempo y mi razón, no me ayudaron. Es mas, diría que se quedaron, en su lugar... esperando a que mi cabeza, haga un quiebre y se abra, y vea cosas nuevas, gente nueva, y un YO nuevo. Esta vez, tuve que abrir los ojos, pasar de solo mirar, a observar cada detalle, cada secuencia, cada segundo... y así, aprendí a que siempre puede haber algo peor. Tuve que abrir los ojos , y darle lugar a un nuevo mundo, a un nuevo día, a una nueva vida... llena de esperanza y MUCHOS sueños. Solo espero que el destino, con mi ayuda y con el tiempo a favor, me de todas las cartas, para poder jugar este juego, que algunos llaman vida.
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